El suspenso mantiene atento al lector en esta novela basada en hechos reales, nos lleva de la mano por los dramáticos acontecimientos que en 1946 horadaron la tranquilidad de una humilde y trabajadora familia cubana. Todos creían que la respetada y querida tía, estaba de viaje en el interior de la isla, cuando la verdad era que estaba muerta. A los pocos días un amigo supo, por pura casualidad, que el cuerpo sin identificar, encontrado en el baño de la Estación Terminal era Aida Rosa y así se los informó. Años después con un minucioso trabajo de investigación su sobrina nieta desentraña la verdad sobre lo acontecido. Premio novela del concurso “Aniversario del Triunfo de la Revolución” del MININT, 2020