Dos libros de José Soler Puig, El pan dormido y Bertillón 166, y uno de Lydia Cabrera, Cuentos negros de Cuba, fueron presentados en el Memorial José Martí, una de las subsedes de la Feria Internacional del Libro de La Habana 2025.
Publicados por la Editorial Oriente, los tres volúmenes pertenecen a la Colección Biblioteca del Pueblo, "una idea que se ha rescatado para esta feria y que está integrada por autores considerados clásicos para ponerlos nuevamente en el circuito de los lectores nacionales", dijo Roberto Carlos Fournier Kindelán, subdirector de la Editorial Oriente, a cargo de la presentación.
El auditorio integrado por estudiantes de séptimo grado de la secundaria básica Eduardo García Delgado y una representación de la Empresa de Servicios Técnicos Industriales (Zeti), devino el primer público al que se presentaron los tres títulos en su nueva edición.
El presentador calificó las dos obras de Soler Puig como paradigmáticas y abundó sobre la trama de Bertillón 166, Premio Casa de las Américas en 1960, que ha devenido símbolo de lucha contra la opresión. En sus páginas se relata “toda la crueldad de la dictadura batistiana de aquellos años contra los jóvenes, contra toda la población cubana. Vamos a presenciar historias humanas. Nos habla de la fibra humana: madres en busca de los hijos que han sido apresados; torturados que desaparecen en las calles de Santiago de Cuba”.
Fournier comentó que Bertillón 166 inspiró la película Ciudad en rojo, de Rebeca Chávez, una reconocida cineasta y documentalista cubana, que “tomó los valores humanos de la novela”. La lectura puede servir para comparar lo que aparece en la novela y no aparece en el cine. Para el subdirector de la Editorial Oriente, la novela sigue siendo muy disfrutable, con diálogos diáfanos, que hablan de la población de Santiago de Cuba.
Al respecto, indicó que La Habana, como capital, ha sido bastante tratada en la literatura y constituye prácticamente una marca comercial, “pero, tenemos en José Soler Puig un autor cuyas novelas se centran en Santiago de Cuba y el mundo santiaguero. Hace de Santiago el eje alrededor del cual se mueve su obra y coloca a esta ciudad como su mundo, en el entorno narrativo de la nación cubana”.
De acuerdo con Fournier, El pan dormido, publicada por primera vez en 1975, es la novela más ambiciosa de Soler Puig en ese momento, aunque él consideraba como su obra más importante Un mundo de cosas, que se publicó posteriormente. "José Soler Puig trató, como escritor, llegar al estatus de Lezama Lima, llegar al estatus que tienen autores como Carpentier, que son más conocidos, pero Soler Puig, desde Santiago de Cuba, desde el oriente del país logró una obra como esta, que tiene una dimensión muy importante dentro de la narrativa cubana e hispanoamericana".
Al referirse a Lydia Cabrera y su obra, consideró que si bien Fernando Ortiz fue el teórico, con sus ensayos con su obra sobre la cultura y los orígenes de Cuba, Lydia Cabrera “es la que aporta el elemento ficcional, la que aporta la narrativa, la que aporta la creatividad de esos orígenes, de lo que somos”.
Aunque su obra más conocida es El monte —dijo— Los cuentos negros de Cuba, publicados en 1936 en Francia, por la editorial Gallimard, aparecieron por primera vez en idioma español, en 1945, en La Habana. A su juicio, es una de las obras más importantes de Cabrera porque cuando ella estudiaba en París, en los años 20-30, existía un movimiento muy importante de acercamiento al tema de la negritud, a África como continente y su cultura, a las raíces de la nacionalidad. Se despierta en ella la curiosidad por esos orígenes y los cuentos orales que portaron las personas esclavizadas, a través de los años.
“Ella se acerca a su propia nana, quien la introduce de alguna manera en ese mundo. Empieza a coleccionar todas esas narraciones orales, cuentos que contaban las nanas y transitaban de generación en generación. Los rescata, los reescribe y nos los presenta en esta obra Los cuentos negros de Cuba”, relató.
Para despertar el interés por la lectura de esos cuentos, en el público adolescente, el presentador les leyó el primero del libro, El mosquito zumba en la oreja, y organizó improvisadamente una rifa para obsequiar un ejemplar de cada título.
Según les explicó, la Editorial Oriente fue fundada en 1971 por iniciativa de Juan Almeida Bosque, para llenar la ausencia de una editorial que publicara y posicionara autores de la región oriental en el contexto nacional.
Si en sus inicios publicó exclusivamente títulos de escritores de esa zona, luego comenzó a publicar a firmas de todo el país, fiel a su lema: “Una editorial para todos”, que responde también a la gran variedad de títulos y géneros que abarca, de narrativa, ficción, obras para niños y jóvenes, libros de divulgación científica y hasta los de autoayuda, así como la Colección Bronce, dedicada a la historia.