La 30 edición de la Feria Internacional del Libro de La Habana (FILH) correspondiente al año 2022 quedó inaugurada esta tarde de miércoles en el Complejo Histórico Militar Morro–Cabaña. El acto contó con la presencia de Miguel Díaz–Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República; Inés María Chapman, Viceprimera ministra cubana; Alpidio Alonso, Ministro de Cultura; Juan Rodríguez Cabrera, Presidente del Comité Organizador de la FILH, así como con la asistencia de Alejandra Frausto, secretaria de Cultura en México y el Excelentísimo Señor Miguel Díaz Reynoso, Embajador de México en nuestro país, entre otras personalidades, escritores, funcionarios e invitados.
La apertura, a ritmo mexicano, contó con la actuación del mariachi del Ballet Folklórico de México Amalia Hernández. A continuación, se mostraron dos materiales fílmicos alegóricos a la vida y obra de los escritores cubanos a quienes se dedica esta edición de la Feria, Luis Álvarez Álvarez y Alberto Prieto Rozos.
El primero, declaró sus deudas vivenciales y de escritura con su Camagüey natal, que, de alguna manera, afirmó, debió conducirlo a la literatura. La herencia de su biblioteca familiar y sus ancestros mambises, además de todo un orgullo, también forman parte de sus raíces humanas y literarias, contó el escritor. Mis libros han estado vinculados a los intentos de hurgar en la identidad nacional y también en ese empeño mayor de explicarse el mundo, declaró Álvarez.
Por su parte, Alberto Prieto Rozos rememoró que las lecturas de su infancia, lejos de cuentos y ficciones, comenzaron por la historia. El destacado intelectual recordó a su maestro Manuel Galich en cuanto a seguir sus dictados sobre la necesidad de visualizar la historia de América Latina. En la investigación sobre este continente tengo un centro bien definido, puntualizó. El más grande de los privilegios, el prestigio que me otorga el Instituto Cubano del Libro es que la Feria del Libro se dedique a mi obra, subrayó.
A continuación, hizo uso de la palabra la señora Alejandra Frausto Herrero. Además de dar las gracias por ser recibidos en Cuba, la funcionaria mexicana felicitó al presidente Díaz–Canel por su cumpleaños. En sus palabras, Frausto trasmitió a la presidencia y al pueblo de Cuba el saludo del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador y anunció la pronta visita a la Mayor de la Antillas del mandatario de la hermana nación.
La invitada destacó la importancia que conceden ambos países al desarrollo y acceso del pueblo a la cultura. Eso nos hace latir como naciones, subrayó. La secretaria de Cultura en México recordó el largo camino de hermandad entre los dos países y reafirmó la franqueza y sinceridad entre los pueblos y gobiernos de ambos territorios. En su mensaje, abrazó al pueblo lector de Cuba, que ama la cultura, y deseó gran éxito a esta Feria.
Por la parte cubana, hizo uso de la palabra Juan Rodríguez Cabrera, presidente del Comité Organizador de la FILH. Estamos aquí para hacer realidad esta fiesta de las letras y el saber, expresó el funcionario. Enfatizó la significación de la amistad entre las naciones de Cuba y México y recordó que este país es el único que ha ostentado en dos ocasiones la categoría de País Invitado de Honor de nuestra FILH.
El también presidente del Instituto Cubano del Libro, subrayó la envergadura de un evento cultural que recorre todo el país y que llega hasta los barrios. Una Feria como esta, afirmó, representa la voluntad de nuestra nación de preservar su identidad y de seguir defendiendo nuestra cultura. Rodríguez Cabrera también dijo que este evento se hace, no solo bajo las circunstancias terribles de una pandemia mundial sino bajo la presión del más largo bloqueo económico, comercial y financiero que recuerde la humanidad. Sin embargo, el funcionario recalcó que, bajo los preceptos de Fidel, este empeño hace suyas las ideas de que la literatura y los libros no son para el beneficio exclusivo de unos pocos, sino para beneficiar al pueblo y hacerle llegar lo mejor y más alto de toda la creación literaria humana. Cuba vive en su historia y su cultura. Cuba es un corazón latiendo en cada libro abierto, afirmó.
Con estas palabras, y otra vez bajo aires de música mexicana, quedó inaugurada la edición 30 de la Feria Internacional del Libro de La Habana.