Esta tarde en la sala de presentaciones Nicolás Guillén de la Fortaleza San Carlos de la Cabaña se celebró el acto de clausura de la 30 Feria Internacional del Libro de La Habana. Como es usual en la ceremonia el comité organizador del evento aprovecha para galardonar a los mejores stands que participaron.

En esta ocasión resultaron ganadores como Mejor stand modular el correspondiente a Ediciones Acuario del Centro Félix Varela y la Organización Nacional de Bufetes Colectivos como Mejor stand libre. Así mismo obtuvieron menciones el stand del CPLL de Pinar del Río, el del Estado plurinacional de Bolivia, el del Proyecto Nuestra Historia, el stand del SET, el de la República de Angola, el de Ediciones Vigía y el stand de la Distribuidora Nacional del Libro.

Del mismo modo, los miembros del Comité Organizador decidieron otorgar algunos reconocimientos especiales: al Salón infantil Tesoro de Papel, al Proyecto Cuba Digital, al Salón Profesional del Libro, al Programa del Proyecto Nuestra Historia, al proyecto vinculado con el cuarto objetivo de la agenda 20/30 que involucra a varias instituciones y al pabellón del País Invitado de Honor.

A continuación, Miguel Díaz Reinoso, embajador de México en Cuba, tomó la palabra. Comentó que la 30 Feria Internacional del Libro ha sido «una gran fiesta que celebra la cultura, que no es más que celebrar el gusto por la vida». El espacio fue oportuno para ver el diálogo entre creadores y con el público. Desde México se trajeron más de 30 mil volúmenes que se quedarán en la librería Tuxpan. Y fue la oportunidad para encontrar textos que hacía años no se veían. «Ha sido un honor poder decir que estuve allí, en la primera feria después de la pandemia», afirmó. «La Feria fue un reto, una suerte de apuesta: por precios accesibles, por nuevos lugares, por sacar la feria de La Cabaña y funcionó».

Finalmente, Juan Rodríguez Cabrera, presidente del Comité Organizador, pronunció las palabras de clausura del evento.